para tí mi bloger amig@
Hoy
quiero hablar de la política en la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana
(UNAP), y quiero reservarme a vagas exégesis
de una ley que se presta a un sin número
de interpretaciones. En este caso, me refiero a la nueva ley universitaria
Nº30220. Una ley que tiene más de año y
medio de vigencia. Y que sin embrago, ha estado llena de polémica y
resistencia. Esta ley universitaria
intenta reformar la precariedad de las universidades del Perú, elevar su
calidad y brindar mecanismos de fiscalización de los fondos que manejan.
Junto a la ley se crea la
Superintendencia Nacional de Educación Superior
Universitaria (SUNEDU) un órgano independiente adscrita al Ministerio de
Educación. Y entre sus funciones está el de aprobar y denegar las licencias de
las universidades públicas y privadas, supervisar la calidad del servicio
educativo. La Ley también menciona la elección de 12 universidades pilotos para
alcanzar la calidad y estas han sido
seleccionadas por su importancia geográfica y antigüedad, la UNAP es una de las
escogidas.
Es
importante echarle un vistazo a la coyuntura Internacional, nacional para luego
presentarles mis reflexiones del contexto local.
El
mundo está en crisis, una crisis ambiental, financiera y de paz mundial. Hay
muerte por causa de ambiciones y el dominio energético (Los precios de los
minerales y la del petróleo están en bajas constantes) por las grandes corporaciones, es un esfuerzo de dominación a
gran escala, y quizá el resurgimiento de un nuevo orden de dominio global. En
el Perú estamos a portas de ir nuevamente a las elecciones presidenciales, tiempo
en el que los hachazos por las espaldas empiezan a ser más visibles por los
medios radiodifusores y los televidentes simplemente son consumidores pasivos.
Estamos enfermos. ¿A caso decidiremos por una nueva enfermedad? pueda que así
sea, ya que muchos han perdido el criterio de pensar y reflexionar. Un humanismo
consciente está ausente.
Entre
las nueve universidades que se resisten en adecuarse a la nueva ley
universitaria esta la UNAP. Según investigaciones de la agencia OJO PUBLICO
afirman que la UNAP maneja un presupuesto de más de 83 millones de soles. Existen razones para dejar el cargo con nada
de presupuesto ¿Qué cree usted? Es cierto
acerca de la caída del precio de barril del petróleo, todos lo sabemos. Y que el monto de dinero no es igual en las
arcas de la UNAP. Sin embrago, la universidad con su actual rector el Dc. Rodil
Tello. Está encaminándose a mayores precariedades, al aferrarse al cargo y la
resistencia en adecuarse a la nueva ley universitaria, puedo dar fe de la
enorme decepción presente entre la comunidad universitaria. Una ausencia de un
plan de construcción académica y de infraestructura de calidad universitario,
unos estatutos creados a paporretas, solo con el cuento de cumplir la ley, es por tanto esta gestión un gran retroceso al
progreso y evolución de la especie humana. No obstante, una gran estafa al
atrapar a muchos incautos a sus intereses de poder mas no a progresar en
ciencia y crear nuevas tecnologías. Pero, este domingo 20 de diciembre se
realizará una elecciones internas Donde se elegirán rector y decanos de
facultades, donde “democráticamente” se votará por un sólo candidato al rectorado. Zumaeta el único candidato de la coalición de
docentes, quien es un acérrimo defensor del partido de los narco indultos. Él no
es la solución y como se están dando las elecciones no me parecen limpias, es
una elección sobre el mamarracho, llena de ilegalidades. Diciendo esto no estoy
intentando defender a Rodil, más bien mostrar el panorama electoral de este
momento, seguimos con el dilema de elegir la enfermedad terminal con menos
dolor. Al fin de cuenta cualquier decisión que tomemos nos incitará al suicidio,
al ponernos en cualquiera de estos dos bandos corruptos. ¿Por qué elegir entre
el cáncer o el sida? La política debe cambiar, es aquí la urgencia de que gente
pensante despierte e intervenga. No permitamos que la ignorancia y la corrupción
nos sigan gobernando. No nos dejemos
engañar con falsas promesas. No resistamos a la corrupción en el poder.
A
través de este escrito hago un llamado a toda la comunidad universitaria a ser
críticos responsables y por amor al progreso humano no nos dejemos vencer por
el lado oscuro, al tomar una decisión facilista, elegir al mal menor. No permitamos, que las cosas se queden como están,
debe de cambiar. Sí, quizá la universidad
sea sancionada, y que las cuentas universitarias se congelen, pero que las
cosas realicen con toda legalidad y que los corruptos vayan a la cárcel y se
les inhabilite cualquier cargo público, y se limpie la universidad completamente
(esto menciono tanto en forma literal y metafóricamente hablando). Muchos
docentes están tomando decisiones muy pasivas y camaleónicas, de apuros porque saben
la sanción real que se viene para la universidad. Los estudiantes deben de
estar informados y tomar decisiones independientes, sobre todo crítico. Y aquí
pregunto: ¿Has leído la nueva ley universitaria? No? Entonces no nos dejemos
llevar por impulsos de pasiones externas, a genas a nuestro propio
entendimiento. A los compañeros de antropología social, hago el llamado a la conspiración. Somos
estudiantes de Ciencias Sociales ¿Somos acaso nosotros los responsables de
convulsionar la realidad? Tenemos la responsabilidad de planificar y de proponer
alternativas de solución, que construyamos una plataforma real de lucha por los
derechos de nosotros los estudiantes. Aquí nos están maltratando, perjudicándonos
en nuestro progreso académico e intelectual. Ya vivimos en un apocalipsis,
hasta el cambio climático no nos permite ir a clases, según la resolución
rectoral más estúpida que jamás haya leído antes. Es más es ahora en tiempos de
crisis que los estudiantes y la juventud invirtamos todas nuestras energías
para despertar, ya que los viejos están en espera de la jubilación. La decisión que tomemos este
domingo espero que realmente traiga un cambio el sistema instaurado, no somos más
que simples marionetas, esclavos del poder. Necesitamos una convulsión en el
sistema, trabajar de forma conspirativa, la gente honesta en sinergia. Que crezca
y que se expanda desde el corazón y el conocimiento a toda la comunidad universitaria,
luego al país entero y quizá trascienda en el mundo.
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