para tí mi bloger amig@
Moribundo,
está botado en el sofá.
Está hipnotizada de esa caja,
chica cuadrada,
hace corte circuito,
por ahora está apagada.
tu llanto
advierte tus ganas de vivir.
Corre a fuera, salte lumbrera.
Son las lágrimas que abofetean
nuestras moradas.
Por un instante cerré los
ojos,
Interrumpiéndome ese chillar
de miserable.
Griteríos sin destinos.
Huésped seguro en casa ajena.
Hay de los que cosechan sin
sembrar, y gozan de privilegios,
¡Una racha de suerte y
destierro es el camino de su karma!
Tu ira no discrimina,
Algún inocente crío, se
retuerce de frío,
Sólo, sí. Sólo.
Busca calentura en los senos
de una madre imaginaria,
quizá algún día la encuentre.
Mientras yo, ardiendo tras el
corte circuito.
Nado, en la nada inseguro,
Lamentablemente el verdugo de
la noche regrese por su parte.
Como todas las noches, en
silencio.
Quema y moja también.
Retumbando, cada vez con
bofetadas más fuertes
que al interior, arde el
cólera.
Anuncio de mi muerte, nuestras
muertes.
Al fin el silencio gobierna el
universo,
y el caos se apoderó de
nuestros días,
también de los dioses.
Entonces desperté,
era primavera
en ese invierno tropical.
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