martes, 20 de octubre de 2015

Un Poema de Paso: Escrita para quienes no gustan leer. No lo leas. Nº 001

para tí mi bloger amig@

Estimados futuros colegas de Antropología Social de la UNAP;
Escribo esta carta con la finalidad de reposar con desprendimiento las energías que me afligen en mi interior, les escribo porque sueño que somos los responsables de algún cambio, espero para bien. Al escribir estas líneas no quiero sonar un cucufato, ni pretendo con la prosa enamorarles con huachaferías, más bien el ideal, sea el encontrarnos tan puros e intelectuales, en la universalidad en la que nos movemos hoy, y la identidad que cultivamos.
Quiero llegar a sus mentes, invitaros a la reflexión. Echar con miradas críticas a la  realidad de nuestra escuela de Antropología Social. Si bien, muchos hemos escuchado los discursos expuestos por algunos compañeros, profesores en las reuniones, llegando hasta el cansancio. Cantándonos en el inconsciente nunca cambiaremos, nunca avanzaremos, jamás seremos felices.  Sea entonces, el pan vivir el descontento al no tener profesores antropólogos, lingüistas, sociólogos, arqueólogos de carrera y de calidad. La desidia impera sobre los estudiantes de antropología social de la UNAP, somos unos mediocres, simples pedazos de eses sin dueño, prueba de ello se ve al no reclamar por la mala calidad de enseñanza; al elogiar la inaptitud,  al loar la mediocridad intelectual, al no contar con presupuestos para nuestras prácticas de campo, a la calma de navegar en un currículo pobre y sin presupuestos y el confort de este sistema cómplice, contentándonos al ingerir solo migajas, Cuando el pastel de una Facultad de Ciencias Sociales puede hornearse. Esto será posible cuando la masa sea consciente de su textura. Lamentablemente la voz de la protesta viene siendo encendida por los lobos rapaces. Y los buenos, invernándose los huevos están. ¿Cuándo tendremos algún artículo de actualidad de análisis de la realidad con una mirada antropológica escrito por algunos de los profesores  de antropología de la UNAP? ¿No es acaso la escritura una de las principales herramientas del quehacer antropológico? ¿Cuándo los estudiantes conscientes botaran sus miedos? ¿Cuándo la creatividad y la energía de nuestra juventud lucharan para cambiar la realidad? ¿Cuándo dejaremos de ser simples sirvientes del sistema alienante?  
Muchas preguntas por responder, Habrán más supongo. Pero les dejaré con hambre, porque pienso escribir más. Un poema de paso.


Título: ¡Despertad!

“Hay gente que se alimentan de ilusiones, mientras tanto, otros respiran mierda”
¡Despertad! Que os aquejan sobremanera la muchedumbre y
La servís a vuestra merced.

Corroe el hechizo de la muerte a vuestro alrededor,
Cual castigo afán,
Conspicuo de este satánico plan,
Bien hecho, el maltrecho,
Que mientras baila en el hilo flojo de la muerte
Esos cuernos,  en la sombra dibujan trazos
Infundiendo el cohecho de lo impío egoísmo.
Já… la risa maquiavélica del sistema,
Modelo del saqueo,
Que del ingenio del zorro inteligente proviene.
No importa si una bella damisela muriese
Mucho menos, sí se tratase de una “miss Amazonía”.
¿Pueblo?
No es importante, si tras de sus descaecimientos,
Se llenan de dineral nuestras butacas.
Sí, solo sí, intentemos prolongar la vid de nuestro bienestar.
Llanos creaturas del “dios”
Escuchad el clamor de este  vuestro siervo

Simplemente, ¡despertad!